Los abajo
convocantes y firmantes, afiliados de la Unión Cívica Radical de Salta,
constituimos a partir de la fecha una corriente interna, UCR LÍNEA SALTA RA con el
objetivo fundamental de fortalecer el radicalismo en la Provincia,
generando formación institucional, ética y política con vocación de poder en su
dirigencia, y de esta manera contribuir al crecimiento y jerarquización de la
UCR en todo el país.
REAFIRMACION DOCTRINARIA
Planteamos en
primer lugar la necesaria reafirmación doctrinaria, principio
fundamental para poder aglutinarnos como una fuerza política seria.
La UCR nació a la
vida política argentina esencialmente como propuesta de reparación en el plano
social e institucional, en un país de profundas desigualdades socio económicas
y total falta de respeto a normas
jurídicas e institucionales, de allí que se puso énfasis en las transformaciones políticas, jurídicas,
educativas, económicas y sociales, como instrumentos para acceder a la igualdad
de oportunidades. Si bien sus formas de acción no descartaron nunca los
mecanismos revolucionarios, como la insurrección popular, la UCR llevó
a cabo tales procedimientos extremos cuando se le cerraron otros mecanismos de
expresión, a la vez que fueron siempre instrumentos y jamás
objetivos en sí mismos, ya que, como lo señalaba Yrigoyen, el programa de la
UCR era el fiel cumplimiento de la Constitución, que las prácticas
fraudulentas del régimen habían
reducido a lo estrictamente formal, cerrando todos los espacios a la libre
expresión ciudadana.
 |
| Inaguración, viernes 2 -11-2012 |
La UCR, por lo tanto, es el natural custodio
de la tradición republicana y liberal y
del ideario de igualdad que consagra nuestra Constitución Nacional y el propio
Escudo Nacional, que propone un apretón de manos de iguales, ideario que
incluye el derecho de propiedad y la libertad de comercio, junto a todas las
demás libertades: religiosas, de expresión, de organización, etc. tal
cual lo consagra el Preámbulo de la Constitución que era tan bien recitado por
Raúl Alfonsín en la recuperación de la democracia.
La UCR es un partido de tradición republicana y democrática, no es un partido conservador porque tiene incorporada una
fuerte impronta reformista que deviene de su vocación reparadora y de su humanismo que pone al Hombre en el
centro de su preocupación, lo que supone que no está conforme con el orden
existente, el cual busca perfeccionar, aunque no mediante saltos al
vacío sino precisamente a través de la corrección de los vicios que
las otras vertientes ideológicas van conformando en el ejercicio del poder.
Reafirmamos, la UCR está muy distante y alejada de los nacionalismos, marxismos, fascismos y movimientos populistas;
es ni más ni menos un partido político en rigurosa línea con
el principio de democracia social y representativa que está consagrado en
nuestra Constitución Nacional.
La UCR descree de las ideologías
nazi-fascistas, marxistas o populistas que proponen reemplazar la economía de
mercado y la democracia representativa por otras formas de organización
socioeconómicas o políticas, todas ellas fracasadas, y se opone con el mismo énfasis al
laissez-faire (dejar hacer) que es
reivindicado actualmente por las ideologías neoconservadoras (mal llamadas
neoliberales), las economías de
mercado a ultranza, sin controles gubernamentales, conducen a la concentración
económica y a la propia inestabilidad de las economías.
 |
| Inauguración, viernes 02-11-2012 |
La UCR tiene una profunda vocación americanista, lo que no está enfrentado a
su ideario de libertad e igualdad que la conecta estrechamente con los orígenes de
las revoluciones independistas y anticolonialistas de América. Por otra
parte, la tradición internacional de la Argentina, que la UCR perfeccionó
durante sus gobiernos, se propone la amistad y el respeto a la
soberanía de todos los pueblos del mundo, aun
existiendo litigios, porque la UCR considera que todos los
conflictos deben solucionarse por la vía del dialogo y la negociación pacífica,
deben perfeccionarse los lazos de amistad y entendimiento. Así fue con Chile y así debe ser
en todos los casos, incluidas nuestras disputas con el Reino Unido y
nuestras diferencias con otros países.
La UCR es también profundamente
respetuosa de la diversidad cultural y étnica que existe en América y en
nuestra Argentina. No obstante, como cree que la especie humana es única, no
comparte la idea de la hegemonía de una cultura por sobre las demás, sea ésta
la cultura europea, o la de los pueblos ab-origen. Por lo tanto, en el
marco del más escrupuloso respeto por las identidades culturales, no
promueve, por acción u omisión, guetos,
alentando por el contrario la conformación de una cultura nacional
integradora de todas nuestras tradiciones y la de los pueblos que la componen,
sin invasiones ni predominios de ninguno por sobre las demás. Para
decirlo de otra forma, y tomando nuevamente una figura de Raúl Alfonsín, todas
las banderas y banderías son admitidas, pero en un mismo nivel, y por encima de
ellas, el pabellón nacional.
DIAGNÓSTICO
DE SITUACIÓN
La situación
nacional
 |
| Inauguración, viernes 02-2012 |
La Argentina, luego
de la renuncia de De la Rúa a la Presidencia de la Nación en Diciembre de 2001,
superó hacia 2003 la grave recesión y deterioro social que se produjo como
consecuencia de la crisis producida e incubada en la Convertibilidad y la
brutal devaluación asociada a la salida de este sistema, devaluación que produjo una caída del 11% del PBI en 2002 con
respecto a 2001[1] y una brutal contracción en los ingresos,
unido a un espectacular crecimiento del desempleo y la pobreza extremas.
Esta situación de mejora en la
economía se fortaleció en los años siguientes en que la economía argentina
mostró muy elevados índices de crecimiento, a la vez que el desempleo comenzaba
a reducirse, junto con las condiciones de pobreza más extremas, todo ello
ayudado por una excepcional coyuntura
internacional que proporcionaba elevadísimos precios por nuestros productos
de exportación.
Sin embargo, hacia 2006
aproximadamente, la tasa de inflación que había comenzado a aumentar, en
comparación con la estabilidad de precios del período de la Convertibilidad,
aceleró su tasa de crecimiento en forma tal que cada año la tasa de inflación
estaba bastante por encima de la del año anterior[2].
Junto a esto, las condiciones de mejoramiento de la pobreza extrema dejaron de
mejorar, y solamente se evitó nuevas caídas gracias a la acentuación del
enfoque clientelista del gobierno hacia la pobreza, sin que hubieran mediado
medidas de fondo para combatirla.
Por otra parte, el gobierno aumentó
irresponsablemente su gasto público, utilizando fondos públicos o de fuera de
su derecho, como los fondos de los afiliados a las AFJP y las reservas del
Banco Central, sin controles gracias a los superpoderes, y construyó un capitalismo
de amigos, con grandes concentraciones de riqueza y poder en manos del grupo
gobernante y sus aliados. Al mismo tiempo, se echó mano nuevamente al control
del tipo de cambio para evitar que la inflación sea todavía mayor, mientras se
amordazaba al INDEC, un prestigioso instituto público de compilación de
estadísticas que el gobierno ha transformado en el INDEK y ha desjerarquizado
injustificadamente, lo mismo que otras áreas de la Administración Pública.
En el plano institucional, el
gobierno avanzó sobre las provincias y municipios con total impudicia, extorsionándolos
con el retaceo de recursos a los que tienen legítimo derecho, con el objeto de
comprar voluntades políticas. Simultáneamente, ejerce permanente presión sobre
el Congreso, la Justicia, y otros órganos de control, desdibujando así el
equilibrio de poderes y vaciando de contenido a la democracia representativa.
La Situación
provincial
La Provincia de
Salta estuvo gobernada por el justicialismo 25 de los últimos 29 años, 12 años
ininterrumpidamente por un mismo Gobernador del Partido Justicialista, hasta
2007. Si bien mostraron algunos resultados en términos de obra pública y
turismo, fundamentalmente en Capital, produjeron retrocesos importantes en áreas como la
educación, que se degradó ostensiblemente, a la vez que se mantuvo intacta la
estructura de pobreza estructural que caracteriza a Salta desde hace largas
décadas.
Desde Diciembre de 2007 y hasta la
actualidad, nuevamente el Justicialismo se perpetúa en el poder, habiéndose
observado notorios retrocesos en la situación económica y social de la
Provincia, con agudizaciones de la situación de pobreza estructural,
recrudecimiento de enfermedades pretendidamente erradicadas, nuevas caídas en
la calidad de la educación y un gravísimo deterioro de la seguridad, a lo que
se suma una caída en el ritmo de nueva obra pública, particularmente viviendas,
a todo lo cual se suma una impresionante concentración de poder, el cooptamiento
de prácticamente todas las intendencias y el control absoluto de la Legislatura
y los órganos de control.
A este gravísimo cuadro de
situación, se suma el descarado avance por parte del gobierno provincial hacia
los partidos políticos de oposición, en una muestra del más crudo desdén por
las instituciones de la República, situación que la UCR de Salta sufrió en
carne propia.
La situación
interna del radicalismo salteño
La UCR de Salta
viene exhibiendo una pobre performance electoral desde hace muchos años atrás y
recién se consiguió un resultado más satisfactorio en las últimas elecciones
para Diputado Nacional, en las que se logró ubicar un diputado en el Congreso
Nacional, luego de varios años en que el radicalismo de Salta no tuvo presencia
en el Parlamento.
Si bien la recuperación electoral
resultó significativa, particularmente en comparación con los resultados de la
elección inmediatamente anterior, no es menos cierto que la UCR de Salta se
encuentra carente de referentes de cuño propio -como lo demuestra precisamente
el hecho de que el Diputado electo no es afiliado aunque esté identificado con
el ideario radical- y esto, unido a las interminables rencillas internas, celos
y descalificaciones personales que caracterizan la vida “política” de la UCR de
Salta, ha hecho que el partido perdiera densidad política y electoral, al mismo
tiempo que se reducía marcadamente la afluencia de nuevos afiliados para seguir
conformando el “semillero” de nuevos dirigentes a través de lo que debería ser la
normal renovación generacional.
Justamente, esta situación llevó a
algunos radicales a considerar que la forma de recuperar el partido podía lograrse
a través de alquimias electorales, lo que resultaba perfectamente funcional a
la estrategia de cooptación del gobierno provincial, incluso integrando el
proyecto político del peronismo, el tradicional rival político del radicalismo.
El resultado, naturalmente, no podía
ser otro que la perpetuación de la decadencia radical: ¿por qué debería la gente votar
al radicalismo, si éste está vaciado de contenido ideológico y de
ofertas políticas superadoras, y peor aún, su ideología –o falta de ella- se
mimetiza con la del peronismo, que es su rival tradicional?
La propuesta de UCR
LÍNEA SALTA RA se sitúa exactamente en las antípodas de esta estrategia de identificación con el peronismo: para
fortalecer el radicalismo hay que plantear una estrategia precisamente
“radical” que consiste en insistir en lo que nos hace radicales, frente
a nosotros mismos y a la sociedad, esto es, la defensa incondicional de las instituciones, su perfeccionamiento, un énfasis muy firme en el federalismo, y
la permanente mirada hacia los sectores
más débiles de la sociedad, los pobres, puesto que, como decía Alem, “mi causa es la
causa de los desposeídos”, pero, claramente, para que los desposeídos dejen
de serlo, y no para servirse de ellos para tener el poder y
perpetuar la pobreza, porque, claro está, cuando los pobres dejen de serlo, no
estarán obligados a votar a quien los mantiene endémicamente en su situación de
marginación .
OBJETIVOS GENERALES
Los objetivos
generales que propone la UCR LÍNEA SALTA
RA, son los siguientes:
ü fortalecer la imagen de la UCR ante la sociedad y los propios
afiliados, mostrando un accionar político profundamente identificado con
nuestra doctrina y una conducta personal de los integrantes enteramente
democrática, honesta, ética y puesta al servicio de los intereses de la
Provincia, la Nación y la UCR
ü prestigiar la política
ü honrar la tradición de profunda vocación democrática, de defensa de las
instituciones, de los intereses de la Nación y la Provincia, y con una mirada
en particular en defensa de los menos favorecidos que ha caracterizado
históricamente a la UCR
ü recomponer y afianzar el federalismo
ü jerarquizar los institutos fundamentales de la democracia: principalmente,
el Congreso y la Justicia
ü recuperar la ética política y la democracia participativa, abandonada
luego del gobierno de Raúl Alfonsín
OBJETIVOS EN EL ORDEN NACIONAL
Éstos son los
siguientes:
ü alcanzar una fuerte presencia electoral para que la U.C.R de Salta esté
representada en el Congreso Nacional, Senadores y Diputados.
ü llevar a los órganos de conducción nacional de la UCR a los radicales
con mejor posicionamiento en el orden interno y de la opinión pública
provincial, para hacer oír la voz del radicalismo salteño en el Comité Nacional
y contribuir al crecimiento de la UCR en todo el país
ü hacer conocer al radicalismo nacional el especial papel de la
Provincia, que padece graves deterioros sociales traducidos en una educación
decadente que contribuye a la fracturación social, la más alta tasa de
desocupación del país y uno de los más altos índices de patologías agudas, como
TBC, enfermedades de transmisión sexual, respiratorias, etc
ü difundir ante los organismos de conducción nacional la tarea que llevan
a cabo las instituciones formales del radicalismo salteño, tanto de la Capital
como de todo el interior provincial
OBJETIVOS EN EL ORDEN PROVINCIAL
Los objetivos
propuestos para el trabajo del radicalismo salteño en el orden provincial, son
los siguientes:
ü recuperar un auténtico federalismo interno, identificando la
problemática de los comités departamentales y difundiendo su accionar
ü señalar y difundir la problemática nacional, provincial y de los
departamentos de la Provincia relacionada con los aspectos económicos,
educativos, sociales, etc
ü acercar, a través de la difusión y el conocimiento de las actividades
de UCR LÍNEA SALTA RA, a los
radicales desencantados, e incorporar nuevos afiliados para ampliar las
actividades políticas, particularmente, entre la juventud
ü mantener una movilización permanente de los afiliados y simpatizantes
basada en una tarea política sistemática, por oposición a la conducta
espasmódica que caracteriza a la UCR, que se moviliza -y a medias- solamente para
las elecciones internas y generales
ü acercar iniciativas a los órganos de conducción de la UCR, al Instituto
de Políticas Públicas, para plasmarlas en documentos y propuestas concretas
ü consagrar como mínimo el Senador Nacional por la minoría en las elecciones
de 2013
ü llevar a la Cámara de Diputados de la Nación un mínimo de un Diputado
Nacional (se eligen tres) en las elecciones de 2013
ü aumentar significativamente la cantidad de legisladores provinciales
que permitan mostrar una alternativa de poder serio en la provincia
ü aumentar significativamente los concejales en toda la Provincia en las
elecciones de 2013
ü consagrar intendentes en la
Provincia en las elecciones de 2015
ü alcanzar el gobierno de la Provincia en 2015, con vocación de poder,
mostrando un partido preparado para ser una seria alternativa en Salta.
Convocatoria a los afiliados
UCR LÍNEA SALTA RA no sería sincera en su propuesta si no señalara, conforme su
diagnóstico, que, por una parte, su armado y propuesta persiguen, en primer
lugar, el propósito de acceder al gobierno de la UCR salteña con
lo cual se explicita la propuesta propia y al mismo tiempo se destaca
claramente lo que queremos modificar dentro del radicalismo salteño; por otra
parte, no comparte los métodos y procedimientos que aplican en política
muchos radicales salteños, consistentes, entre otros, en la descalificación
sistemática de los demás correligionarios y la práctica de la confrontación
permanente, y si bien no existe ninguna objeción a estos modos de hacer política
en un sentido moral, sí es legítimo
señalar que las mismas no se comparten y en consecuencia nuestra convocatoria se dirige a
los radicales que buscan por encima de las apetencias personales y sin
menoscabo de éstas, la construcción de una verdadera propuesta política basada
en la doctrina radical, unido a un trabajo sistemático y permanente,
antes, durante y después de los procesos eleccionarios, internos o generales, libre
de oportunismos y, sobre todo, de connivencias con quien constituye el
adversario a derrotar fuera de la UCR: histórica y fundamentalmente, el
peronismo hoy junto a los partidos de filiación conservadora.
UCR LÍNEA SALTA RA propone esfuerzo “sangre,
sudor y lágrimas”, como punto de arranque de la
construcción de un nuevo radicalismo, y se compromete, como punto de llegada, a
transformar el radicalismo en una palabra que sea sinónimo de lo que nunca
debió haber dejado de ser: el partido de la gente que cree y actúa con
honradez, con austeridad republicana, y también, con propuestas
políticas efectivas para corregir lo que el mandato de reparación de la UCR nos
impone a los radicales.
Salta, noviembre
de 2012
[1] La economía se había contraído aproximadamente el 5% en 2001 con
relación a 2000; pero cayó 11 puntos en 2002 con relación a 2001. Datos de
Orlando Ferreres, 200 de Economía Argentina. Ed. Norte y Sur. Buenos Aires,
2010.
[2] La inflación de 2002 fue un 32% más alta que en 2001; un 11% más alta
en 2003 que en 2002; un 14% más alta en 2007 que en 2006, y un 19% más alta en
2008 que respecto a 2007. Fuente,
Ferreres, op. cit.
No hay comentarios:
Publicar un comentario